lunes, enero 30, 2012

PALABRAS

Fuerza, paz, tranqulidad, confianza (en uno mismo), confianza (en el otro), precaución (que no freno), ESPERANZA, Fe (en uno mismo, en el otro, ya dije confianza, no?), caridad (la que faltaba de la terna, la que siempre (hace) falta), sensibilidad, sensatez, serenidad, sentido (común)... "seny", inocencia, bondad, coraje, resistencia, amistad, compañía, risa, llanto, lágrimas, resurrección, tiempo...PACIENCIA...VIDA.


jueves, enero 26, 2012

VERGÜENZA II

Ayer empataron a 2 'Madriz' y 'Barca', y muchos hablaron del árbitro, algunos opinando de lo inopinable, a tenor de las imágenes. Pero no, no es ésta una entrada del tema que más interesa a los españolitos de a pie (y así nos va) de 'jurgol', no, no lo es. Y es que ayer se supo el resultado de otro partido, con resultado de 5 a 4. Y es que ayer, por este resultado, Francisco Camps, anterior presidente de la Generalitat Valenciana (Gobierno regional de aquí) fue declarado inocente (no culpable) de cohecho impropio pasivo; en cristiano: siendo presidente, de aceptar regalos de directivos y presidentes de empresas de organización de eventos. Y la presunción de inocencia la tenemos todos, pero cuando en el juicio se oyen escuchas telefónicas en las que el señor Camps y su señora esposa agradecen al director de la empresa los regalos Navideños ('con el mío te has pasado un huevo'), cuando hay exceso de información, cuando todos ya sabemos lo que pasa, resultados como este hacen recordar aquella frase: "La justicia española es un cashondeo". Pero no, no voy a cargar contra la justicia, porque, qué caramba, han sido los miembros de un jurado popular, 5 de ellos, los que le han dado la inocencia, a él y a su ex-valido, que también estaba acusado. Y este resultado, de 5 a 4, creo que es un claro reflejo de cómo está la sociedad valenciana en este momento, con (un poco menos de) la mitad indignados por el despilfarro y los evidentes tejemanejes del PP en nuestra región, y (un poco más de) la mitad bien abducidos por la televisión autonómica pública absolutamente parcial, bien por la baja calidad humana y profesional de la oposición actual (no hay enemigo), bien por (como han sabido bien difundir algunos) 'la que ha liao Zapatero', o bien por aquel famoso chiste:

Dios, creando el mundo, decidió repartir dos virtudes a cada hombre.
A los franceses les hizo patrióticos y orgullosos
A los ingleses puntuales y metódicos
A los alemanes trabajadores y responsables
...
Llegando a los valencianos, Dios dijo: Les haré inteligentes, buenas personas y del Partido Popular.
Pero los ángeles respondieron: Señor, les está dando tres virtudes.
Y Dios dijo: No, sólo pueden tener dos...

Verbigratia, No hay valenciano que pueda que tenga estas tres cualidades, por lo que queda definido todo valenciano militante del PP...

En fin, que la responsabilidad última de la incapacidad o de la corruptibilidad y el desgobierno de nuestros gobernantes recae en nosotros mismos, y hay que despertar, ver más allá del bolsillo propio, de los mensajes que recibimos (desde dónde los recibimos, quién los manda y cuáles son sus intenciones), hay que ver más opciones (no vivimos en un estado bipartidista), hay que perder un poco de tiempo en desgranar los programas electorales, en ver más allá de las caras que nos presentan, y hay que exigir responsabilidades, políticas y judiciales, especialmente a aquellos malos gobernantes o corruptos del partido al que hemos votado. Porque si no, y cerrando el círculo, la política en Valencia y España será (es) muy parecida al fútbol. A saber: Ayer pasó al ganar por la mínima, 5 a 4, el Partido Popular, eliminando al PSOE de la eliminatoria de Copa (Urna). Y al final nos convertimos en hooligans, en hinchas de los partidos políticos, en lugar de ser ciudadanos responsables. Pero como digo siempre, para esto hay que mirar más allá del ombligo propio.

Para terminar, un vídeo que a algunos hará reír, y que si a otros no les hace sacar los colores y sentir vergüenza es que cumplen a rajatabla el chiste, o no son inteligentes o no son buenas personas.


lunes, enero 23, 2012

COMO LOS CANGREJOS

Se supone que cuando uno aprende, por las buenas o por las malas, aprende. Se supone que cuando uno recibe lecciones las debe aplicar en su vida futura, se supone que si uno se equivoca debe rectificar. Lo que uno no entinede es cómo hay gente que va para atrás, como los cangrejos, bueno, éstos no van para atrás, si no hacia un lado. Pena de ver ciertas cosas, pena de ver que no aprenden, aunque no sea responsabilidad de uno, que tampoco aprende. Penita pena. Pero es que uno no puede evitar preocuparse, ni hacerse responsable. ¿Por qué será todo tan difícil?. Penita pena de ver que el hombre (y la mujer) es el único animal que tropieza dos (y mil) veces con la misma piedra, pena ver que se insiste en lo que tan mal ha salido, pena al ver que se vuelven por los (malos) fueros. Aunque si ya no es responsabilidad de uno, que alguien me diga porqué uno no puede evitar sentirse mal... muy mal.

miércoles, enero 18, 2012

ABRAZOS

Esto es, sin duda, lo que debía haber hecho.


Esto es, sin duda, lo que deberíamos hacer todos. Pero también hay que controlar los enfados, digo.

lunes, enero 16, 2012

MADRID

Aprovecho la circunstancia para incluir una entrada, una deuda con una ciudad, que tenía pendiente desde hace ahora un mes. Y viene a colación, porque hacía mucho que no tenía pesadillas. Y no hablo de sueños agobiantes o de final no feliz, hablo de pesadillas reales, de las que uno (afortunadamente) se despierta a voluntad para no seguir soñando. Y las pesadillas vienen por lo que vienen.

En fin, ahí va: Madrid. Ciudad de la que siempre he renegado. Viví en ella un año, pero apenas me enteré (allí cumplí los dos añitos). Pero, salvo aquella estancia, mis viajes a Madrid siempre han sido de paso o por motivos profesionales; y siempre que por allí he pasado me ha parecido una ciudad gris y estresante, con gentes corriendo en todas direcciones.

Pero hete aquí que esta vez (diciembre de 2011) viajé por otros motivos a la ciudad de los Austrias, para visitar a un amigo y para tratarme cierta dolencia del corazón y del alma. Esta vez el que iba estresado era yo, e iba para relajarme y caminar, y eso que viajé en época fría y gris. Y, como siempre, las cosas cambian si cambia el punto desde el que se miran. Y de ahí que tuve tiempo para caminar, y caminé, y me empapé del espíritu pre-navideño del centro de la urbe, a pesar de mis pesares. Me gustó ver a la gente, hasta la estresada, me gustó ver, oír y respirar humanidad. Tal es así, que la cura se tornó en enfermedad, y la enfermedad en cura.

No relataré mi visita al Prado, ni la media hora en que, pasmado, me dediqué a contemplar El Jardín de las Delicias de El Bosco (por cierto, que los especialistas en arte me critiquen, pero servidor con 10 años dibujaba mejor que Goya). Tampoco viene al caso relatar mis paseos por las atestadas Plaza Mayor (con su espectacular colección de paraetas de belenes y demás), Sol, Gran Vía, Princesa... Sólo relataré el domingo por la mañana en el rastro de Cascorro cuando, cargado con mi equipaje, arrojé la cura a la basura y enfermé, o quizá cuando dejé de lado las dolencias y sané, quién sabe. El caso es que me gustó el paseo, me gustó el barrio y su humanidad, me gustó escuchar un tango familiar [padre a la guitarra, hijo al acordeón y madre, gruesa y sentada, a la voz tanguera desgarrada] a las puertas de una iglesia (curioso contraste). Como la música me tocó la sensibilidad, ya de por sí a flor de piel, busqué inspiración divina dentro de la iglesia: último banco a la derecha, como siempre, en el rincón y, a ser posible, detrás de una columna. Y no sé si la hallé, no oí, o no escuché, así que seguí con mi periplo.

De camino a Atocha, y como tenía tiempo, entré en la Casa Encendida, y quizá encontré allí lo que iba buscando en "la casa del señor"[?]: "La palabra del Señor"... Vamos, que había un concierto de música Góspel (God Spell). El caso es que aquellas gentes venidas de las Américas me contagiaron mucha energía, me animaron, me animé, a base de cantar el "Oh happy day" y dar palmas cual afroamericano de Louisiana. Y volví sin saber de mi futuro, pero con energías renovadas, ilusión y esperanza... por tomar las decisiones correctas...

El problema viene cuando los sucesos venideros no dependen exclusivamente de las decisiones de uno, y tampoco es cuestión de darse de cabeza contra un muro, cual soldadito de juguete.

En fin, la dolencia ahí sigue, aunque uno se cura, o sigue enfermando, quién sabe; lo importante es participar, seguir en el juego. El caso es que me reconcilié con esa ciudad "de amor y de odio" (como decía Sabina), porque me dijo mucho.


jueves, enero 05, 2012

2011

Parece curioso, aunque desde mi punto de vista, siempre a contra-corriente, perfectamente adecuado, que mi primera entrada de 2012 se titule 2011 (Mis reflexiones sobre la ciudad de Madrid podrán esperar). Y es que al final de cada año es inevitable hacer balance, y yo, a contra-corriente, pues lo he hecho al comenzar el nuevo.

Y qué fue de 2011? Un año de desilusiones, pero de esperanzas, un año de disgustos, pero de alegrías, un año sufrido, pero vivido. Y es que no hay nada peor que regodearse en la cómoda inactividad, en el "virgencita virgencita, que me quede como estoy", en el inmovilismo. Por eso me indigné y salí a la calle a decir que dejaran de tomarnos el pelo, por eso luché por el amor, hasta que el cuerpo dijo basta y el corazón dañado falló. Un año en el que en tiempos de crisis conseguí dinero, para trabajar y dar trabajo, y dí trabajo. Un año de arreglos  (para nada estéticos) del cuerpo propio, y de arreglos y desarreglos de mente y alma. Año, como digo, de disgustos, pero de alegrías, de dar y darme oportunidades, y de estrellarme contra paredes (porqué lo hacemos todo tan complicado cuando es sencillísimo). En definitiva, un año VIVIDO. A veces las cosas no salen como uno desea, o los deseos no van en consonancia con las acciones, pero como decían los payasos de la tele: Lo importante no es ganar, lo importante es participar... y divertirse. Y como dicen los libros de autoayuda (autoayuda para quien los escribe, que buenos beneficios sacan): Lo que no te mata te hace más fuerte, o, como prefiero decir yo (tragaldabas que es uno): Lo que no mata engorda.

Aun así, las lecciones (de vida) no acaban de asentarse (masoca? cabezota? tontoelhaba?), y los trenes, con sus cargas de disgustos y desengaños, pero también de buenos momentos y esperanzas, no acaban de salir de la estación, por más que el guardavías haga sonar el silbato. En cualquier caso, lo mejor que puedo decir de 2011 es que pasó.

Será cuestión de seguir viviendo en 2012..., a pesar de lo que digan algunos que dijeran los Mayas. Y si llegara el caso (como leí una vez en un libro) emularé a los indios americanos, y diré cada mañana al levantarme: "hoy es un gran día para morir".